lunes, 19 de mayo de 2014
El mundo...
Érase una vez un niño que iba a ir con su amigo a la bolera. Cuando llegó la hora de irse abrió la puerta de sucasa... y todo era de chocolate.
Antonio se quedó impresionado y tuvo una idea. Corrió hacia donde había quedado con sus amigos y les dijo que si se comían cosas como farolas, árboles, etc. Pero cuando se iban a empezar a comer el árbol que había a su lado sonó el despertador y al final todo había sido un sueño.
(85 palabras)
Antonio se quedó impresionado y tuvo una idea. Corrió hacia donde había quedado con sus amigos y les dijo que si se comían cosas como farolas, árboles, etc. Pero cuando se iban a empezar a comer el árbol que había a su lado sonó el despertador y al final todo había sido un sueño.
(85 palabras)
El pez
Es un pez de peluche muy bonito de color naranja y rayas negras. Tiene unos ojos muy grandes con una cola grande. Me lo llevaba a algunos sitios. Ahora lo tiene mi prima pequeña, ella duerme con él y lo llama Pablín.
Ya no me gusta tanto como antes pero, en el fondo, siempre me gustará.
Ya no me gusta tanto como antes pero, en el fondo, siempre me gustará.
viernes, 16 de mayo de 2014
Mi bici
Autor: Maksym Kholivchuk
Mi bici era pequeña, verde y roja. Me la regalaron mi padrino y mi madrina. Era "MI MOTO". Cada vez que venía de la guarde la cogía y meiba con ella. Lo que más me gustaban eran los derrapes que hacía e ir cuesta abajo me hacía cosquillas en la barriga.
En este momento me miraréis con una cara así de como "este niño está mal" y alguien dirá a lo mejor "es que no das gracia sino pena, pero penaaaaa..."
Mi bici era pequeña, verde y roja. Me la regalaron mi padrino y mi madrina. Era "MI MOTO". Cada vez que venía de la guarde la cogía y meiba con ella. Lo que más me gustaban eran los derrapes que hacía e ir cuesta abajo me hacía cosquillas en la barriga.
En este momento me miraréis con una cara así de como "este niño está mal" y alguien dirá a lo mejor "es que no das gracia sino pena, pero penaaaaa..."
La vaca
Autora: Ana Morales De Casa
Es un peluche que tengo desde muy chiquitita. Me lo regaló mi hermana cuando cumplí dos años. Tiene un lazo atado al cuello, es blanca con manchitas marrones, es muy suavita. De pequeña jugaba con ella pero aunque ahora no juegue con ella me sigue gustando mucho.
Es un peluche que tengo desde muy chiquitita. Me lo regaló mi hermana cuando cumplí dos años. Tiene un lazo atado al cuello, es blanca con manchitas marrones, es muy suavita. De pequeña jugaba con ella pero aunque ahora no juegue con ella me sigue gustando mucho.
jueves, 15 de mayo de 2014
La pelota del pasado
Autor: Alejandro Sevilla Castro
Yo tenía cinco años y fui a la casa de mi abuela Carmen. Me aburría, mi padre me llevó a una tienda y me compró una pelota del Real Madrid.
Jugaba muy contento con ella... Pero se me empeñó, me quedé un rato llorando en casa de mi abuela.
Sin embargo mi padre no pudo aguantar mi tristeza y compró la misma pelota otra vez. Desde entonces juego con ella todas las tardes y pienso que un objeto antiguo puede tener su importancia para cada uno.
Yo tenía cinco años y fui a la casa de mi abuela Carmen. Me aburría, mi padre me llevó a una tienda y me compró una pelota del Real Madrid.
Jugaba muy contento con ella... Pero se me empeñó, me quedé un rato llorando en casa de mi abuela.
Sin embargo mi padre no pudo aguantar mi tristeza y compró la misma pelota otra vez. Desde entonces juego con ella todas las tardes y pienso que un objeto antiguo puede tener su importancia para cada uno.
Mi Stich de Disneyland
Autor: Andrew Rendell Vera
Me lo compré gracias a mis padres, porque me había portado bien. Y desde ese momento jugaba con él un montón y más porque yo hacía kárate y él era un Stich de kárate. Yo jugaba con su pelo, jugábamos al kárate y muchas cosas más...
Ya no juego con él demasiado pero aún me gusta y me trae buenos recuerdos de muchas cosas.
Y más de Disneyland París.
Me lo compré gracias a mis padres, porque me había portado bien. Y desde ese momento jugaba con él un montón y más porque yo hacía kárate y él era un Stich de kárate. Yo jugaba con su pelo, jugábamos al kárate y muchas cosas más...
Ya no juego con él demasiado pero aún me gusta y me trae buenos recuerdos de muchas cosas.
Y más de Disneyland París.
Un pequeño gran bicho: WINNIE THE POOH
Autor: Antonio Miguel Lucena
Mi objeto es un peluche que tenía desde los 7 días. Me lo regalo mi tía Mari Carmen. Yo estaba en Portugal. Le tengo mucho cariño porque como lo tenía desde menos de un mes de vida pues...
Yo he tenido 5 o 6 WINNIES y ahora tengo 2. Algunos los perdía porque como les tenía tanto cariño, me los llevaba a todos los lados. Pero cuando ya era un poco mayor, 4 o 5 años, me ponía muy triste y nervioso si no lo encontrábamos, aunque luego, al rato, aparecía siempre.
Lo que más hacia con mi Winnie era (de pequeñito) chuparme el dedo y con el dedo meñique darle en la oreja. Al final la oreja me la cargaba a mordiscos pero yo lo seguía queriendo muuuuuuuuuuucho. ¡Y LO SEGUIRÉ QUERIENDO¡ porque es mi pequeño gran bicho.
Mi objeto es un peluche que tenía desde los 7 días. Me lo regalo mi tía Mari Carmen. Yo estaba en Portugal. Le tengo mucho cariño porque como lo tenía desde menos de un mes de vida pues...
Yo he tenido 5 o 6 WINNIES y ahora tengo 2. Algunos los perdía porque como les tenía tanto cariño, me los llevaba a todos los lados. Pero cuando ya era un poco mayor, 4 o 5 años, me ponía muy triste y nervioso si no lo encontrábamos, aunque luego, al rato, aparecía siempre.
Lo que más hacia con mi Winnie era (de pequeñito) chuparme el dedo y con el dedo meñique darle en la oreja. Al final la oreja me la cargaba a mordiscos pero yo lo seguía queriendo muuuuuuuuuuucho. ¡Y LO SEGUIRÉ QUERIENDO¡ porque es mi pequeño gran bicho.
miércoles, 14 de mayo de 2014
Mi peluche
Autora: Darina Muñoz Muñoz
El peluche favorito de mi infancia fue un peluche: un pony de color morado llamado Lidia, con algunas plumas de color morado, con una cola de plumas de color morado...
Ese fue uno de mis peluches favoritos y con el que estuve desde los tres años. Me acuerdo el día en el que me lo regalaron y fue unos de los mejores momento de mi vida. Con el pony yo dormía todas las noches por mi miedo a la oscuridad, también me acuerdo que me lo llevé al parque y el día antes había llovido y había pequeños charcos de agua y se me cayó en el columpio y me puse muy triste porque creía que no había solución. Pero si que había solución...
El peluche estaba guardado en un armario que yo no me acordaba que estaba allí guardado y un día lo encontré y me alegré mucho porque llevaba mucho tiempo sin verlo. Cuando me acuerdo de él es cuando me como una hamburguesa.
El peluche favorito de mi infancia fue un peluche: un pony de color morado llamado Lidia, con algunas plumas de color morado, con una cola de plumas de color morado...
Ese fue uno de mis peluches favoritos y con el que estuve desde los tres años. Me acuerdo el día en el que me lo regalaron y fue unos de los mejores momento de mi vida. Con el pony yo dormía todas las noches por mi miedo a la oscuridad, también me acuerdo que me lo llevé al parque y el día antes había llovido y había pequeños charcos de agua y se me cayó en el columpio y me puse muy triste porque creía que no había solución. Pero si que había solución...
El peluche estaba guardado en un armario que yo no me acordaba que estaba allí guardado y un día lo encontré y me alegré mucho porque llevaba mucho tiempo sin verlo. Cuando me acuerdo de él es cuando me como una hamburguesa.
Mi osito de peluche
Autor: Ángel Muñoz Fernández
Mi osito de peluche es azul, tiene los ojos, nariz y boca marrones. Su nariz es blandita, tiene los brazos y piernas cortas. Mide unos 25 cm. Es el objeto con el que llevo toda mi vida. Me lo regaló mi tía nada más nacer. Lo compró en una farmacia de Elorrio (Vizcaya) junto con una cesta de productos de aseo infantil. Yo lo usaba para dormir.
Este oso sigue conmigo guardado en uno de los cajones de mi habitación.
Mi osito de peluche es azul, tiene los ojos, nariz y boca marrones. Su nariz es blandita, tiene los brazos y piernas cortas. Mide unos 25 cm. Es el objeto con el que llevo toda mi vida. Me lo regaló mi tía nada más nacer. Lo compró en una farmacia de Elorrio (Vizcaya) junto con una cesta de productos de aseo infantil. Yo lo usaba para dormir.
Este oso sigue conmigo guardado en uno de los cajones de mi habitación.
El perrito y su pañal
Autora: Sandra Vargas González
Cuando era pequeña tenía un perrito de plástico que tenía un pañal que si se mojaba se le ponía:
rosa =hembra / azul=macho
Por la noche lo metía en un vaso lleno de agua, lo ponía en la mesita de noche y dormía a su lado.
Por la mañana le limpiaba el agua y lo volvía a meter en el agua y por la tarde lo sacaba del agua y jugaba con él.
Todo esto empezó cuando fui al kiosco y lo vi, le dije a mi madre que me lo comprara y ahí empezó todo.
Yo era muy pequeña y el otro día lo encontré y me puse muy contenta.
Cuando era pequeña tenía un perrito de plástico que tenía un pañal que si se mojaba se le ponía:
rosa =hembra / azul=macho
Por la noche lo metía en un vaso lleno de agua, lo ponía en la mesita de noche y dormía a su lado.
Por la mañana le limpiaba el agua y lo volvía a meter en el agua y por la tarde lo sacaba del agua y jugaba con él.
Todo esto empezó cuando fui al kiosco y lo vi, le dije a mi madre que me lo comprara y ahí empezó todo.
Yo era muy pequeña y el otro día lo encontré y me puse muy contenta.
Mi peluche Pepe
Autora: Natalia Mª Valverde Villar
De pequeña yo creía que había monstruos debajo de la cama pero como mi peluche Pepe estaba a mi lado en la cama, lo cogía y el miedo se me iba.
Lo llevaba a todas partes; si iba a casa de mis abuelos, lo llevaba; si iba a casa de mis abuelitos, lo llevaba; si iba a casa de mi tita, también lo llevaba.
Para mí era tan importante Pepe que cuando nació mi hermano Sergio se lo regalé para que no se sintiera solo en la cuna y lo acompañara siempre.
Todavía él duerme con MI PELUCHE PEPE.
De pequeña yo creía que había monstruos debajo de la cama pero como mi peluche Pepe estaba a mi lado en la cama, lo cogía y el miedo se me iba.
Lo llevaba a todas partes; si iba a casa de mis abuelos, lo llevaba; si iba a casa de mis abuelitos, lo llevaba; si iba a casa de mi tita, también lo llevaba.
Para mí era tan importante Pepe que cuando nació mi hermano Sergio se lo regalé para que no se sintiera solo en la cuna y lo acompañara siempre.
Todavía él duerme con MI PELUCHE PEPE.
Mi peluche de león
Autor: José Manuel Morales Pazo
De pequeño me gustaba un peluche de león, era amarillo y marrón, me lo llevaba en el coche conmigo siempre y tenía música para dormir. Lo llevaba a la guardería, al parque,... siempre lo llevaba conmigo. Jugábamos juntos y ahora lo tiene mi sobrino, pero no le hace tanto caso como yo lo hacía.
Me trae un recuerdo de mi infancia.
De pequeño me gustaba un peluche de león, era amarillo y marrón, me lo llevaba en el coche conmigo siempre y tenía música para dormir. Lo llevaba a la guardería, al parque,... siempre lo llevaba conmigo. Jugábamos juntos y ahora lo tiene mi sobrino, pero no le hace tanto caso como yo lo hacía.
Me trae un recuerdo de mi infancia.
Mi ovejita y yo
Autora: Aitana Pérez Moll
Mi objeto más apreciado de mi infancia fue una ovejita de peluche. Me la regalaron el día de mi cumpleaños cuando cumplí un año.
Mi ovejita tenia rayas de colores y la cara morada. Yo casi todos los días antes de ir al cole le ponía una ropa diferente. Al tiempo de estar con ella le puse de nombre Lola. Yo dormía todas las noches con Lola para sentirme segura porque yo a esa edad tenía miedo de la oscuridad. Al año siguiente mi madre me regaló una cuna de juguete para que Lola durmiera, pero yo no quería porque si no, no podía dormir conmigo en mi cama.
Yo me llevaba a Lola siempre de viaje para estar con ella, cando estaba aburrida en mi casa me ponía a jugar con ella durante mucho tiempo. Por mi santo mi abuela le hizo una manta a Lola de color morado y blanco. Después de tenerla 10 años, casi 11, todavía la tengo pero ya no juego tanto como cuando era más pequeñita.
Mi objeto más apreciado de mi infancia fue una ovejita de peluche. Me la regalaron el día de mi cumpleaños cuando cumplí un año.
Mi ovejita tenia rayas de colores y la cara morada. Yo casi todos los días antes de ir al cole le ponía una ropa diferente. Al tiempo de estar con ella le puse de nombre Lola. Yo dormía todas las noches con Lola para sentirme segura porque yo a esa edad tenía miedo de la oscuridad. Al año siguiente mi madre me regaló una cuna de juguete para que Lola durmiera, pero yo no quería porque si no, no podía dormir conmigo en mi cama.
Yo me llevaba a Lola siempre de viaje para estar con ella, cando estaba aburrida en mi casa me ponía a jugar con ella durante mucho tiempo. Por mi santo mi abuela le hizo una manta a Lola de color morado y blanco. Después de tenerla 10 años, casi 11, todavía la tengo pero ya no juego tanto como cuando era más pequeñita.
Mi camión de juguete
Autor: Ismael Torres López
Hace mucho tiempo, cuando tenía cinco años, estaba jugando con mis soldados de plástico. Mi padre me dió un camión de juguete, de color rojo y de metal. Después me explicó que era su juguete preferido cuando tenía la misma edad que yo y que se lo compraron sus padres en Alemania. También me dijo que en España todavía no había ese tipo de camiones. Desde entonces le tengo mucho cariño y lo he guardado como un recuerdo muy especial de mi infancia.
Hace mucho tiempo, cuando tenía cinco años, estaba jugando con mis soldados de plástico. Mi padre me dió un camión de juguete, de color rojo y de metal. Después me explicó que era su juguete preferido cuando tenía la misma edad que yo y que se lo compraron sus padres en Alemania. También me dijo que en España todavía no había ese tipo de camiones. Desde entonces le tengo mucho cariño y lo he guardado como un recuerdo muy especial de mi infancia.
Mi osito
Autora: Alba Meléndez Cuadra
Mi recuerdo de cuando era pequeña es un osito llamado Teddy: marrón clarito, chiquitito y también con un vestidito.
Me lo regalaron mis hermanos el mismo día que nací. Para mí, mi osito es muy importante.
Yo de pequeña le tenía miedo a la oscuridad, pero gracias a mi osito se me quitó el miedo a eso y a muchas cosas más.
Para mí, mi osito significa mucho, me recuerda los buenos momentos, a las personas importantes, cumpleaños, bodas, a comuniones, sobre todo a mi comunión,bailes, el fin de curso, la playa, las navidades...
Yo le echaba colonia, lo peinaba...
Pero aún así lo sigo usando, aunque no le eche colonia ni cosas de esas, sigo durmiendo con mi osito de peluche .
Mi recuerdo de cuando era pequeña es un osito llamado Teddy: marrón clarito, chiquitito y también con un vestidito.
Me lo regalaron mis hermanos el mismo día que nací. Para mí, mi osito es muy importante.
Yo de pequeña le tenía miedo a la oscuridad, pero gracias a mi osito se me quitó el miedo a eso y a muchas cosas más.
Para mí, mi osito significa mucho, me recuerda los buenos momentos, a las personas importantes, cumpleaños, bodas, a comuniones, sobre todo a mi comunión,bailes, el fin de curso, la playa, las navidades...
Yo le echaba colonia, lo peinaba...
Pero aún así lo sigo usando, aunque no le eche colonia ni cosas de esas, sigo durmiendo con mi osito de peluche .
viernes, 9 de mayo de 2014
El primer día de verano
Autora: Natalia Mª Valverde Villar
Era un Miércoles especial para mí, era mi primer día de verano. Recogimos las cosas de la playa y nos fuimos al coche para irnos a Benidorm. Cuando llegamos a la ciudad, nos fuimos a un hotel. Llegué a mi cuarto, cogí mis cosas y me fui a la piscina.
Todo pasó muy deprisa, pronto llegó el Domingo, que me preparé mi maleta, la llevé al coche, menos el bañador porque nos íbamos a la playa.
Cuando nos fuimos de la playa yo me puse muy triste. Llegamos a casa y... todo estaba como siempre.
(95 palabras)
Era un Miércoles especial para mí, era mi primer día de verano. Recogimos las cosas de la playa y nos fuimos al coche para irnos a Benidorm. Cuando llegamos a la ciudad, nos fuimos a un hotel. Llegué a mi cuarto, cogí mis cosas y me fui a la piscina.
Todo pasó muy deprisa, pronto llegó el Domingo, que me preparé mi maleta, la llevé al coche, menos el bañador porque nos íbamos a la playa.
Cuando nos fuimos de la playa yo me puse muy triste. Llegamos a casa y... todo estaba como siempre.
(95 palabras)
martes, 6 de mayo de 2014
Un día en la playa
Autora: Alba Meléndez Cuadra
En el verano pasado me fui a la playa de Torre del Mar, donde mi tío nos enseñó a mí y a mis primos a coger coquinas. Después de un rato nos dimos un chapuzón y en una roca me encontré un collar perdido, de perlas azules claras, con un símbolo muy raro, era impresionante Preguntamos por la playa, pero no era de nadie, así que pensamos que era de una sirena.
Esa tarde fuimos a pescar a lo hondo del mar, vimos un pez muy grande con brazos y pelo rubio, le pregunté que si el collar era suyo y efectivamente era suyo.
(104 palabras)
En el verano pasado me fui a la playa de Torre del Mar, donde mi tío nos enseñó a mí y a mis primos a coger coquinas. Después de un rato nos dimos un chapuzón y en una roca me encontré un collar perdido, de perlas azules claras, con un símbolo muy raro, era impresionante Preguntamos por la playa, pero no era de nadie, así que pensamos que era de una sirena.
Esa tarde fuimos a pescar a lo hondo del mar, vimos un pez muy grande con brazos y pelo rubio, le pregunté que si el collar era suyo y efectivamente era suyo.
(104 palabras)
La leyenda del perro asesino
Autor: Ángel Muñoz Fernández
Mi padre me contó la historia de un perro que se escapó de la casa de su dueño y se fue al monte con una manada de lobos. Pasado un tiempo, una noche de luna llena, una familia del mismo pueblo se encontró con un enorme perro mezclado con lobo en un viaje. El campesino desde el carro intentó asustarlo pero no se movió del sitio. Bajó al suelo para espantarlo con un palo, pero el perro le mordió por todo el cuerpo y después atacó a su familia. Todos murieron en el ataque.
Actualmente en el pueblo se dice que un perro salvaje aparece en el lugar del crimen y cada vez que paso de noche por el sitio siento escalofríos.
(122 palabras)
Mi padre me contó la historia de un perro que se escapó de la casa de su dueño y se fue al monte con una manada de lobos. Pasado un tiempo, una noche de luna llena, una familia del mismo pueblo se encontró con un enorme perro mezclado con lobo en un viaje. El campesino desde el carro intentó asustarlo pero no se movió del sitio. Bajó al suelo para espantarlo con un palo, pero el perro le mordió por todo el cuerpo y después atacó a su familia. Todos murieron en el ataque.
Actualmente en el pueblo se dice que un perro salvaje aparece en el lugar del crimen y cada vez que paso de noche por el sitio siento escalofríos.
(122 palabras)
lunes, 5 de mayo de 2014
El fin
Autor: Miguel Isak
Juan se fue al colegio y su profesor le explicó que los mayas eran seres inteligentes y que predijeron el fin del mundo. Juan se asustó y vio cómo algo tapaba el Sol.
Pensó que era el fin del mundo pero su profesor le dijo que era un eclipse.
Y Juan cada año, muy contento, ve el eclipse y recuerda cuando él pensó que era el fin del mundo.
(69 palabras)
Juan se fue al colegio y su profesor le explicó que los mayas eran seres inteligentes y que predijeron el fin del mundo. Juan se asustó y vio cómo algo tapaba el Sol.
Pensó que era el fin del mundo pero su profesor le dijo que era un eclipse.
Y Juan cada año, muy contento, ve el eclipse y recuerda cuando él pensó que era el fin del mundo.
(69 palabras)
El anillo de la suerte
Autor: Alejandro Sevilla Castro
Un niño tenía un anillo que le daba buena suerte porque siempre sacaba buenas notas y todo le salía perfecto. Un día no lo encontró en ningún sitio. Se entristeció mucho pero intentó seguir adelante.
Al principio no le salía cono esperaba, aunque poco a poco volvió a tener suerte en los exámenes.
Sin embargo todo esto le hizo pensar que un objeto no podía cambiar su vida. Y empezó a creer en sí mismo.
(75 palabras)
Un niño tenía un anillo que le daba buena suerte porque siempre sacaba buenas notas y todo le salía perfecto. Un día no lo encontró en ningún sitio. Se entristeció mucho pero intentó seguir adelante.
Al principio no le salía cono esperaba, aunque poco a poco volvió a tener suerte en los exámenes.
Sin embargo todo esto le hizo pensar que un objeto no podía cambiar su vida. Y empezó a creer en sí mismo.
(75 palabras)
Un paquete misterioso
Autora: Aitana Pérez Moll
Era sábado por la mañana cuando la historia empieza. Ni Jorge ni yo imaginamos que nuestras vidas cambiarían tan rápidamente. Estábamos en el trabajo cuando nos llegó un paquete misterioso. Yo pensé que era una bomba pero resultó ser un vídeo.
En el vídeo salía un hombre que nos decía una dirección. No decía qué había allí pero necesitábamos saber qué era. Estuvimos un año entero buscando pero cuando creíamos que lo íbamos a encontrar nunca estaba allí. Hasta que un día, en un almacén de la India lo encontramos en una oficina y era un cofre con un tesoro.
(97 palabras)
Era sábado por la mañana cuando la historia empieza. Ni Jorge ni yo imaginamos que nuestras vidas cambiarían tan rápidamente. Estábamos en el trabajo cuando nos llegó un paquete misterioso. Yo pensé que era una bomba pero resultó ser un vídeo.
En el vídeo salía un hombre que nos decía una dirección. No decía qué había allí pero necesitábamos saber qué era. Estuvimos un año entero buscando pero cuando creíamos que lo íbamos a encontrar nunca estaba allí. Hasta que un día, en un almacén de la India lo encontramos en una oficina y era un cofre con un tesoro.
(97 palabras)
Un día muy extraño
Autor: José Manuel Morales Pazo
Había sido un día de verano, un espléndido verano, pero lo que más me ha gustado ha sido lo que he hecho: hoy nos íbamos a ir yo y mi hermana a la selva, lo que no sabíamos era qué animales íbamos a ver. Pero ese día no vimos animales sino un par de botas y dije: "hay que resolver esto". Y me dijeron que sí.
Pero primero habrá que buscar pistas ¿no? Hemos encontrado una pista, es una nota y la nota tiene un mapa, vamos a seguirlo. Y nos llevó al coche.
(94 palabras)
Había sido un día de verano, un espléndido verano, pero lo que más me ha gustado ha sido lo que he hecho: hoy nos íbamos a ir yo y mi hermana a la selva, lo que no sabíamos era qué animales íbamos a ver. Pero ese día no vimos animales sino un par de botas y dije: "hay que resolver esto". Y me dijeron que sí.
Pero primero habrá que buscar pistas ¿no? Hemos encontrado una pista, es una nota y la nota tiene un mapa, vamos a seguirlo. Y nos llevó al coche.
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